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Escritos de León Trotsky (1929-1940)

Algunas consecuencias del conflicto sino-soviético

Algunas consecuencias del conflicto sino-soviético

Algunas consecuencias del conflicto sino-soviético[1]

 

 

3 de enero de 1930

 

 

 

1. Como es sabido, la última etapa del conflicto reveló la total impotencia militar del actual gobierno chino. Este hecho demuestra claramente que, a diferencia de lo que piensan Louzon[2], Urbahns y demás, en Chi­na no hubo una revolución burguesa victoriosa, porque en este caso se hubieran consolidado el ejército y el estado. En China hubo una contrarrevolución triunfante, dirigida contra la abrumadora mayoría de la nación y, por consiguiente, incapaz de crear un ejército.

2. Al mismo tiempo revela de manera tajante la incoherencia de la política menchevique de Stalin-Mar­tinov[3], que desde 1924 se basa en el supuesto de que la burguesía "nacional" china puede dirigir la revolu­ción. En realidad, la burguesía, apoyada políticamente por la Comintern y materialmente por el imperialismo, sólo fue capaz de aplastar la revolución y reducir el estado chino a la impotencia total.

El conflicto sino-soviético reveló, en su etapa militar, la tremenda superioridad de la revolución proleta­ria [rusa], debilitada por la política funesta de la direc­ción de los últimos años, sobre la contrarrevolución bur­guesa [china], que disponía de un importante apoyo di­plomático y militar imperialista

4. La victoria de la Revolución de Octubre sobre la contrarrevolución de abril (el golpe de Chiang Kai-shek de abril de 1927)[4] en modo alguno puede conside­rarse un triunfo de la política de Stalin. Por el contrario, esa política ha sufrido una serie de graves derrotas. Chiang Kai-shek recompensó a Stalin por los servicios prestados adueñándose del ferrocarril. Stalin se jugó posteriormente a favor de la alianza con Feng Yu-siang, con resultados igualmente desastrosos[5]. Después de abril de 1927 la Oposición se pronunció en contra del bloque aventurerista con Feng Yu-siang contra Chiang Kai-shek, con la misma energía con que había protestado contra el bloque Stalin-Chiang.

5. Olvidando todos los principios, Stalin apostó al Pacto Kellog -y nuevamente perdió-[6] cuando el gobierno soviético suscribió el pacto del imperialismo norteamericano, capitulación que resultó tan vergonzo­sa como inoperante. Al firmar el pacto, ese supuesto instrumento de paz, Stalin ayudó al gobierno norteame­ricano a engañar a las masas trabajadoras de Norteamérica y Europa. ¿Con qué fin suscribió el pacto? Ob­viamente, para ganarse la buena voluntad de Estados Unidos y acelerar el proceso de reconocimiento diplo­mático. Como era de prever, esto no sucedió, ya que el gobierno norteamericano no tenía por qué pagar un re­galo. Basándose en el Pacto Kellogg, Nueva York apro­vechó la primera oportunidad que se le presentó para desempeñar el papel de protector de la China frente a la república soviética. Moscú se vio obligada a responder enérgicamente, lo que fue correcto e inevitable. Pero esta actitud frente al intento del gobierno norteamerica­no de intervenir demuestra la forma criminal e irres­ponsable en que actuó Stalin al firmar el Pacto Kellog.

6. Todavía está planteado el problema del destaca­mento comunista revolucionario al mando de Chu Te[7]. Pravda publicó un artículo al respecto cuando el conflic­to estaba por entrar en su etapa militar. Después, no supimos nada más sobre estos obreros y campesinos chinos, a los que alguien envió a la lucha armada invo­cando la bandera del comunismo. ¿Con qué objetivo se los envió a la lucha? ¿Qué papel jugó el partido? ¿Cuál era el futuro de este destacamento? Y, por último, ¿en qué trastienda se resuelven estos problemas?

Respecto de este último punto, tan importante como todos los demás, no puede hacerse por el momento el balance definitivo. Pero todo demuestra que el aventu­rerismo burocrático, fue siempre responsable de haber debilitado la revolución china y agotado sus reservas.



[1] Algunas consecuencias del conflicto sino-soviético. The Militant, órgano semanal de la liga comunista de Norteamérica (oposición de izquierda), 8 de Febrero de 1930. En 1929 el gobierno soviético y el gobierno del Kuomintang chino, encabezado por Chiang Kai-shek llegaron al borde de la guerra, cuando este intentó derogar los tratados de 1924 que estipulaban la explotación conjunta del Ferrocarril Oriental Chino, el tramo Manchuriano del viejo Ferrocarril Transiberiano. Se produjeron algunos choques armados antes de que Chiang se retractara. Trotsky estaba firmemente convencido de que los intereses de las revoluciones china y mundial exigían que el ferrocarril permaneciera en manos soviéticas, mientras no se lo pudiera entregar a un gobierno representativo del pueblo chino. Esto lo llevó a polemizar duramente con los oposicionistas y cuasi-oposicionistas que mantenían una actitud pro-Chiang Kai-shek o neutral. Porque, en su opinión, esta posición equivalía a desechar la teoría marxista del estado y la caracterización de la Unión soviética como estado obrero degenerado (véase La defensa de la Unión soviética y la oposición, 7 de Septiembre de 1929, vol. 2 de este tomo).

[2] Robert Louzon (n. 1882): Sindicalista que en los años 20 militó durante un breve período en el PC Francés y se separó de él junto con Pierre Monatte para fundar La Révolution Proletarienne en 1924 y la Liga sindicalista en 1926. Abandonaron sus posiciones comunistas a fines de 1929 y principios de 1930; los artículos en los que Trotsky polemiza con ellos aparecen en León Trotsky on the trade unions, Pathfinder Press, 1969 [Sobre los sindicatos, ediciones Pluma, Bs. As. 1974].

[3] La política menchevique de Stalin-Martinov se refiere a la política que empleó la Comintern en China y condujo a la catástrofe de la revolución china en 1925-27. La tendencia menchevique surgió en 1903 en el partido obrero socialdemócrata ruso; luego se constituyó en partido independiente y se opuso a los bolcheviques y a la revolución de Octubre con el argumento de que la revolución debía ser dirigida por la burguesía. Stalin, si bien nunca militó en las filas mencheviques, aplicó esa misma teoría en China a mediados de la década del 20. Alexander Martinov (1865-1935): perteneció al ala derecha menchevique antes de 1917 e ingresó al PC apenas en 1923. Fue el principal autor de la teoría del “bloque de las cuatro clases” (burguesía, pequeña burguesía, campesinado y proletariado) en China, que trataba de justificar la estrategia stalinista de subordinar el movimiento obrero a la burguesía “progresista”.

[4] Chiang Kai-shek (1887-1975): Comandante militar derechista del partido nacionalista burgués chino Kuomintang durante la revolución d e1925-1927. Los comunistas entraron al Kuomintang, siguiendo las órdenes de la dirección de la Comintern, y los stalinistas aclamaron a Chiang como gran revolucionario hasta abril de 1927, cuando dirigió la masacre de los comunistas y sindicalistas de Shangai. Gobernó china hasta 1949 cuando lo derrocó el PC.

[5] Feng Yu-siang (1880-1948): el “general cristiano”, señor de la guerra que controlo una buena parte de la China noroccidental hasta 1926. Cultivó su reputación d adversario tenaz del imperialismo, aceptó la ayuda soviética en 1925 y visitó Moscú en 1926-1927. Se unió al Kuomintang en agosto de 1926, cuando Stalin y Chiang Kai-shek todavía eran aliados. En junio de 1927 apoyó a Chiang contra el PC y rompió sus relaciones con Moscú.

[6] El pacto Kellog de 1928: acuerdo gestionado por el secretario de estado de Estados Unidos Frank Kellog, por el que los firmantes se comprometían a abstenerse de hacer la guerra. Fue firmado originalmente por 15 países y luego ratificado por 63 entre los cuales se hallaba la Unión Soviética. Trotsky sostenía que, al firmar el pacto, los stalinistas hacían concesiones sin principios al pacifismo burgués.

[7] Chu Te (n. 1886): ingresó al PC chino en 1922. Había sido oficial del ejercito y un señor de la guerra de la china del sur. Y luego fue comandante de un cuerpo del ejercito del Kuomintang a partir d e1927. Tras romper con Chiang Kai-shek condujo una unidad militar controlada por el PC que se unió a las tropas de Mao Tse-tung en la primavera de 1928. Fue comandante militar del PC durante la guerra sino Japonesa y durante la Guerra civil de 1946-1949 contra Chiang Kai-shek. En la actualidad se encuentra en situación de semi retiro pero sigue ocupando puestos en el gobierno chino.



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